Laboratorio

ENSAYO BIOÉTICA
MARIA ALEJANDRA

A diario solemos sorprendernos con los “fascinantes” y agigantados pasos de la ciencia y la tecnología, tanto así que empezaron a gustarnos más los aparatos consus colores metalizados obedientes a nuestras ordenes que la conversaciones personales y los abrazos en “vivo”; decidimos cambiar la simplicidad de lo “explicito”, del movimiento de cejas, desonrisas reales o fingidas, por la traducción de gestos, de abrazos, de besos que nos da una computadora o un celular, cuando chateamos con alguien. Tanto nos sorprendemos con sus pasos que olvidamos losllamativos colores del agua, de las flores, los rugidos naturales de animales y comenzamos a conformarnos con fotos, tal parece que nos gusto del todo el azul del agua y sus habitantes, que decidimoscambiar a consta de todo su color, su olor, por el de los residuos que nuestra “hermosa” tecnología le otorga, y los peces, por las botellas de las marcas conocidas, por el paquete que contenía elalimento que ahora tanto nos gusta. No nos pareció agradable el color de los arboles, de sus tallos y comenzamos a volverlos opacos, a pintarlos de gris, así mismo empezamos a decorar el cielo.Los fascinantes y agigantados pasos acallaron las razones por las muchos despertamos el deseo de hacer ciencia, me refiero a las ganas de cambiar el mundo, de disfrutar y sentir interiormente loque hacemos, de hacer algo grande, pero que después, mezclado con las ansias de poder y dinero nos hicieron olvidar nuestra responsabilidad con el mundo, el deber con nosotros mismos. Esa ciegafascinación por lo nuevo, por los saltos gigantes, es lo que nos lleva hoy a estudiar el concepto de bioética, a introducir desde ahora en nuestras vidas la conciencia del cuidado por el mundo, la concienciapor la que muchos, desde años luchan, me refiero a aquellos que ante el olvido de la responsabilidad social decidieron defender el verdadero significado de ciencia: un criterio de verdad y una...