Mediacion familiar

Un mar de amor entre dos tierras

Constanza Vera Valenzuela

Cuando presentamos la mediación como una alternativa a la solución de los conflictos que surgen cotidianamente en las relacioneshumanas nos situamos inmediatamente en un plano de acción que implica la intervención de un tercero, pero de un tercero del que se espera, actúe en forma imparcial, pero, ¿es realmente posible actuardesde la imparcialidad?, ¿podemos, como actores mediadores, quedarnos bajo el velo de la discreción y actuar desde afuera, sin involucrarnos?, ¿puede, la mediación, ser algo no personal?.
La palabraMediación, era utilizada por los romanos durante la antigüedad para hablar del méditerranée, “la mar entre ambas tierras”, tomando este concepto es una buena analogía hablar de la mediación como el mundoque divide dos tierras, pero no una división que resta, sino una división que suma, un mundo que divide y a la vez acerca, donde puede producirse el punto de encuentro de dos tierras que puedenverse muy lejanas.
Si al observar la mediación, y el trabajo que ocurre con ella, lo hacemos desde esta visión algo más idealista y poética, es posible tomar la esencia que humaniza la mediación y ladiferencia de la negociación: la esencia del amor. Todo acto humano está condicionado por el amor, y la mediación o la acción de mediar, debe funcionar y debe plantearse desde el muelle del amor. Es elamor, en todas sus representaciones, lo que determina el actuar de las personas, en tanto todo lo que nosotros, personas-individuos, hacemos se alimenta del amor o en el peor de los escenarios, de lafalta de este. Es por ende, imposible, separar el actuar humano de sus sentimientos, para racionalizar y objetivar nuestras acciones. No podemos ser completamente imparciales en nuestros juicios ydecisiones, especialmente con aquellas que implican la participación de otros; no somos seres divisibles o autómatas, se encuentra fuera de nuestro rango de acciones separar las emociones de lo que...