Mirando a oliver

Mirando a Oliver

Un recorrido en la obra de Charles Dikens, acompañando el corazón de Oliver Twist, sintiendo y vibrando en su marcha por su
corta vida, cargada de murmullos
y lamentos suyos y de otros….
Autora: María Guadalupe Dávalos González
Oliver inicio el mundo con un sollozo que sabia que estaría presente en los años que seguían a su infancia, la muerte de su madrecon el último aliento de darle vida a ese niño que se retorcía deseando no venir, quedarse en ese sitio tibio. Sin apellido ni nombre, el no saber sus raíces, como un árbol solitario, a mitad de la colina.
Miraba a Oliver su piel suave con un olor a rosas venido de dentro, se adivinaba un destello de tristeza; -¿Oliver sabría lo que le esperaba?-
Vi como lo llevaron a aquelespacio del hospicio oscuro y frío, y depositaron su cuerpo sobre sábanas ásperas, la mirada del pequeño se quedo un momento quieta, impactada por la rudeza de la persona que deposito su frágil cuerpo sobre la cama, su rostro era la expectación de un acontecimiento venidero, al silencio antes de un huracán. Oliver llevo sus manos blancas cual alas de gaviota a su boca y las mordisqueo conansiedad, tratando de que sus miedos no lo traicionaran.
Era un rincón oscuro, húmedo, y callado donde encontré a Oliver sentado su escaso cuerpo de nueve años, delgado y pálido, arremolinado con la figura de un compañero de castigo, no había ingerido el poco alimento que le es proporcionado por la encargada del hospicio. Sentí el corazón del pequeño marcar despacio, apenas si hacía un sonidocansado, sus labios habían olvidado sonreír. De pronto la puerta se abre y entro la encargada a llevarlo a toda prisa para quitarle la suciedad de varios días que estaba pegada a su cuerpo, tratando de ser parte de esa piel blanca y delicada. Cuando se anuncio que el pequeño podría ser cambiado a otro propietario la respiración de Oliver se agito, la sentí que huía de su cuerpo y se anidaba enalgún espacio de la lúgubre casa; lo seguí hasta donde se estaba llevando el juicio, de su nuevo comprador, alcance a verlo arrodillado suplicante que no deseaba ir con aquel hombre que más que hombre tenía apariencia de una ave de rapiña.
Regresó a casa, el trato no fue cerrado, ¿Por qué Oliver quiso regresar a ese lugar?- no lo entendí-
Salí a respirar aire, me asfixiaba el lugar, cargado dedolor, y angustia, Y mis ojos se posaron en un anuncio que rezaba claramente, se vendía a Oliver por 5 libras, ¡A Oliver el pequeño de piel de espuma, huidizo y que ama a sus compañeros, que se han escuchado llorar bajito en las noches, soñar a un ser tibio que lo abraza y consuela; _ ¡no podía creerlo!_
Llego un buen comprador, delgado sin sangre en el rostro, le venía bien su oficio,-dueño de la funeraria-, se cerro el trato como quien compara a un objeto en el mercado, sentí como su cuerpo crujió cuando fue enviado de un empellón al sótano de su nuevo hogar; me quede cerca cuando se anudo a su cuerpo entre los cajones de muerto e inicio a salir gotas cristalinas de sus bellos ojos escurriéndose, para perderse entre sus ropas maltrecha, - ¡nadie consoló a Oliver!-
Mesobresalte; un sonido sordo de quejidos y maldiciones venían del grupo que golpeaba y arañaba a Oliver, lo vi encenderse, enrojecer sus mejillas como atardecer, descubrí una chispa en sus ojos que no había visto, -era ira- acumulada, por el hambre no satisfecha, por el frío de noches interminables, por el miedo al contemplar el rostro de la señora Mann, duro como el mármol que cobija la tumba de losmuertos; le ví esa chispa, cual lava del volcán buscando un espacio para salir y me quede ahí sintiendo pena, por ese cuerpo amoratado y maltrecho. Lo acompañe cuando se despidió de su amigo en la madruga fría, fundiéndose en un abrazo que acalló el canto del grillo y conmovió al viejo búho, caminamos por la veredas, que dormitaba antes que el sol arranque oleadas de fulgor, no dormimos, había un...