Métodos
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CONSEJOS PRÁCTICOS PARA REALIZAR INVESTIGACIÓN
El presente capítulo es nuevo y contiene algunas recomendaciones prácticas para los lectores que realizan por vez primera una investigación completa como una tesis o disertación. Se basa en algunos manuales y documentos elaborados en la Universidad de Celaya y el Instituto Politécnico Nacional por Roberto Hernández Sampieri y sus profesores asociados: Ana Cuevas, Paulina Mendoza y Sergio Méndez. Los ejemplos provienen de trabajos realizados por estudiantes de educación superior —desde licenciatura hasta doctorado—, de varias instituciones latinoamericanas. Desde luego, el capítulo no pretende ser exhaustivo sino mostrar los traspiés más comunes que podemos cometer en el proceso de investigación, particularmente al inicio.
ANTES QUE NADA, ¡NO SE PREOCUPE NI SE ANGUSTIE!
La investigación para la presentación de un trabajo universitario o una tesis, así como cualquier estudio que tenga que llevar a cabo cuando sea profesionista, implica un esfuerzo que demostrará su tenacidad y capacidad para integrar el conocimiento que tiene que ver con el campo profesional que haya elegido. El secreto para desarrollar una investigación con calidad es muy simple: destine un tiempo específico diario o semanal para ello y debe ser constante. Pero sobre todo: ¡nunca entre en un estado de pánico o temor ni se deprima! Siga trabajando y rápidamente podrá ver los frutos de su perseverancia. Sea paciente. Tenga siempre en mente sus cursos sobre métodos de
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investigación y la bibliografía, o las referencias que consultó, serán de gran ayuda en todo el proceso. Además, a lo largo de sus estudios ha ido obteniendo conocimientos que ahora debe incorporar. El primer paso consiste en elaborar su proyecto de investigación o tesis. Seleccione un tema o una idea de un área que le interese, y en la que, además, se desenvuelva con facilidad, conozca bien, lo motive o inquiete. Elabore una lista con ellos y platíquelos con sus compañeros, su familia, profesores y asesores de su institución. Analice lo que le parezca más conveniente, para disminuir el temor que la mayoría siente con la elaboración de un trabajo de investigación o tesis. Normalmente, la elección del tema le habrá de llevar a alguna idea general, la cual debe ir acotando. Acotar el tema o la idea significa ir precisando el área de su objeto de estudio. Por ejemplo, si estudia la licenciatura en Derecho Fiscal y está interesado por las reformas tributarias más recientes, por lo que pretende que la investigación o tesis se centre en este tema, debe mencionar qué es en específico lo que le importa. Podría ser que le motive la valoración de los efectos de las últimas modificaciones al Impuesto Sobre la Renta (ISR). De este modo está particularizando más el tema o la idea. Pero es necesario ahondar y precisar más, por ejemplo: “Evaluar el efecto de la reciente reforma al ISR en determinado segmento de contribuyentes, digamos los médicos de cierta ciudad”. Aún debe acotar más el tema: ¿el efecto en cuanto a qué? A lo mejor, lo referente al nivel de recaudación fiscal. Entonces su estudio se centraría en el análisis de tal reforma y el efecto en los niveles de recaudación entre médicos que laboran por su cuenta (profesionales independientes que trabajan en sus consultorios y que emiten recibos o facturas por sus servicios). Ahora sí, ya llegó a un tema o una idea más concreta, que como recordará se traduce en un planteamiento. Al final de la investigación, nos dirá si la reforma aumentó, mantuvo o disminuyó el monto total de recaudación de dicha población de contribuyentes y ...
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