Oye tú

¡Oye tú! ¿Qué miras?

¡Chaval! ¡Qué te toco la cara!
Estoy seguro que a cualquier joven o menos joven, no le sonará nueva esta “clave social”. Y, mientras tanto, del seno de nuestra sociedad,brota la interrogante ¿Qué está pasando? La juventud de ahora ¡no es como la de antes!¡se han perdido los valores! Craso error. La juventud de ahora, es la misma que la de cada época, responde a losimpulsos y movimientos sociales que, sin darnos cuenta, experimenta con ellos. Y, así pues, esa “clave social” no responde más que a algún movimiento social que, sin darnos cuenta nosotros, sus adultos,estamos alimentando en cierta forma. Y, ahora, estalla el debate. ¿Quién es el responsable de esa situación? ¿Quién debe poner la solución? Estoy seguro que, algún que otro lector, ya estará pensandoen nuestros gobernantes, políticos y sus instituciones. Perdóneme, pero rotundamente NO.

Desde la prehistoria, el primer “anillo de socialización”, siempre ha sido la familia. Su modelo yestructura, es quien ha ido formando, individualmente, pero a la par colectivamente, a los pequeños de su sociedad. Y, conforme los modelos económicos y sociales han ido incidiendo sobre las familias, éstas,han modificado la educación de sus niños. Estoy convencido que, a cada cambio de modelo, ¡crisis al canto! Pero, actualmente y, ahora sí…¿Qué está pasando?

Nuestra sociedad se ha visto inmersa en uncapitalismo exacerbado, unido a las nuevas estructuras familiares, la incorporación de la mujer al trabajo, y la herramienta del divorcio. Todo ello, unido a la intención de abatir la jerarquíafamiliar, sustituyéndola por “el coleguismo”, empieza a dar ciertas señas del por qué del problema.

Pero, claro, todavía parece que, el problema, es social. Seguiré diciendo, en cierto modo, NO. Aligual que en nuestro quehacer diario, aplicamos los conocimientos adquiridos durante nuestra fase de aprendizaje y maduración, cuando éramos niños, e intentamos mejorar lo transmitido por nuestros...