Reflexiones sobre el género: notas sobre una docencia que busca resignificar la normalidad

PLANTEL (1) AZCAPOTZALCO

REFLEXIONES SOBRE EL GÉNERO: NOTAS SOBRE UNA DOCENCIA QUE BUSCA RESIGNIFICAR LA NORMALIDAD

Presenta:
Profesora Judith Rodríguez Saldaña
Quiero iniciar esta reflexión, partiendo de una idea que propone Clara Jourdan , cuando dice que “…la medida que nos dan nuestras relaciones fuera de la escuela son insuficientes en el aula…” 1¿Cómo se puede enseñar a las alumnasy a los alumnos a actuar para modificar una relación que no les satisface o que les genera conflicto? No me refiero a la actitud que llegan a asumir las y los colegas cuando circunscriben su trabajo a un ambiente burocrático. Esto es, cumplen con el programa y la posición que asumen ante las cuestiones personales es de una aparente total indiferencia, cuando en el fondo tiene la intención depermitir que las cosas sigan como han sido siempre.
Para la mayoría de quienes enfrentamos el trabajo docente e intentamos incidir, creemos saber cómo podemos orientar al alumnado ante las diferentes preocupaciones que les aquejan. Incluso, llegamos a asumirnos como autoridades en la materia. Podemos llegar a creer que lo que decimos es:
• Lo que el alumno o la alumna deben decir o hacer, paramantener las reglas establecidas y no derivar hacia una problemática mayor. En este caso, el adulto se niega a aceptar que el mundo es muchísimo más de lo que ha llegado a conocer y a comprender.
• Algo que pudiera convenir a quien vive la situación, pero cuya decisión es inducida por el profesor o la profesora. Pocas veces se establece una reflexión que le permita al alumno o alumna, convertirseen la persona que toma la decisión, y sobre todo, tomar conciencia de las implicaciones que conlleva dicha decisión.
• Parte de las cosas que hemos aprendido de cómo hemos asumido el sentido de ser personas, ya no sólo por nuestro sexo, sino en especial, por el género del cual nos sentimos que formamos parte y más aún, por los atributos que de ello pueden derivarse, según lo que hayamosaprendido, comprendido y asumido como válidos y convenientes. En este último caso es que me identifico.
Lo anterior, es punto de partida para reconocer que a medida que pasa el tiempo, me resulta cada vez más difícil encontrar una forma adecuada para actuar ante las actitudes de intolerancia, misóginas, machistas, homofóbicas o que pudiéramos considerar como conservadoras, ya que en ocasiones, la críticay el análisis es lo primero que aparece y he llegado a creer que parte de estas observaciones y comentarios son percibidos por ellas y ellos a partir de sus propias interpretaciones.
Es decir, he llegado a caer en la cuenta de que la forma en que entienden cada uno de los comentarios que hago no solamente yo, los materiales que se analizan en la clase, o de sus motivos de consulta, porqueacuden a mí para tratar de resolver algún asunto personal, llevan la marca de los valores e ideas que sus familias les han inculcado. Me encuentro entonces con el hecho de que hay costumbres, creencias, tradiciones familiares, expectativas personales y para otras y otros, que van muy de la mano, con el grado de aceptación o rechazo hacia la búsqueda no sólo de equidad como personas, cuestión quesería el propósito ideal a alcanzar, sino ante todo, de las implicaciones de actuar de forma más abierta, libre de prejuicios o al menos con una actitud más tolerante ante lo que suele verse como “fenómeno” del presente, cuando la historia de la humanidad nos dice que esto ha sido y forma parte de lo que algunos grupos de poder se niegan a cambiar, para mantener el estado que han guardado lascuestiones de género.
Entender dichas situaciones, se convierte entonces en una lucha continua, es enfrentar a los torcidos que como Quijotes habrá que enderezar, luchar contra lo que otros ven como molinos de viento, cuando son en realidad enemigos a vencer. Y puede llegar a pasar que nos acaben considerando el chiflado o la chiflada del lugar. Lo que resulta normal para la mayoría, es motivo de...