Sostenibilidad, Conflicto, Convivencia Y La Ciudad Del Posdesarrollo

Publicado en BioConstruir, nº 4, 2006, pp. 23-32.

Sostenibilidad, conflicto, convivencia y la ciudad del posdesarrollo
Ernest Garcia
Universitat de València
¿A qué nos referimos cuando hablamos de ciudades sostenibles? La pregunta, después de
varias décadas de debate, tiene una respuesta razonablemente clara. Nos referimos a una
situación que responde a los criterios siguientes:
1) Laeficiencia energética y material del modelo de ciudad compacta y limitada en su
expansión (al estilo de las tradicionales ciudades mediterráneas) es superior a la que
resulta de la dispersión suburbana.
2)

Los espacios monofuncionales son simples pero poco diversos e interconectarlos
requiere mucha energía; los espacios plurifuncionales son complejos pero pueden ser
a la vez menos costososambientalmente y socialmente más ricos.

3)

La relocalización de determinados procesos productivos básicos (producción de
alimentos, generación de energía, servicios comunitarios, servicios de los
ecosistemas, etc.) es aconsejable.
La conservación de los espacios ecológica o agrícolamente productivos que aún

4)
5)

existen dentro de los límites urbanos o en su entorno inmediatoresulta crucial.
La rehabilitación del espacio construido y deteriorado (conservación de centros
históricos y regeneración de barrios más recientes) es preferible a la urbanización de
nuevos espacios.

6)

La pacificación de las calles y el fomento de la proximidad -en combinación con más
facilidades para el transporte público y la bicicleta- aparecen como la única
alternativa viable a lacongestión, la contaminación y el ruido producidos por la
motorización privada.

7)

La minimización del volumen y la toxicidad de los residuos (reducción, reutilización,
recuperación, reciclaje) tiende a percibirse como alternativa frente a sistemas de
tratamiento costosos, contaminantes y crecientemente rechazados por las poblaciones
afectadas.
Los criterios anteriores son interdependientesy sólo tienen pleno sentido si son

8)

aplicados conjuntamente. La pacificación de las calles casa mal con la segregación
funcional de los espacios; reducir el volumen de residuos es más fácil si el grado de
localización de las actividades económicas es importante; el mantenimiento de la
agricultura urbana y periurbana requiere la consolidación de los mercados locales;
una inversión de latendencia a la dispersión suburbana sólo es pensable si la
alternativa es un medio urbano caracterizado por la vitalidad, la diversidad, la mezcla
de actividades, la abundancia de servicios y la oferta cultural.

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Publicado en BioConstruir, nº 4, 2006, pp. 23-32.

En resumen: el nuevo paradigma propuesto por el movimiento de ciudades sostenibles afirma
que densidad, diversidad,proximidad, pacificación de las calles, participación ciudadana,
ahorro energético y menos contaminación son aspectos distintos de una misma alternativa. Su
principio más general es que la viabilidad ecológica está asociada a la articulación de la
complejidad. O, dicho de otra manera, que las causas de la degradación ambiental y de la
degeneración cultural de las ciudades son las mismas (y deberíanser contrarrestadas al mismo
tiempo).
Las ideas de sustentabilidad local han dado lugar a una situación paradójica, pues son tan
ampliamente aceptadas sobre el papel como poco practicadas en la realidad. Las ciudades
tardomodernas, las de la segunda mitad del siglo XX, han sido en substancia un producto del
petróleo barato, y se han configurado a través de procesos como los siguientes: eldesplazamiento masivo y cotidiano de la población y el transporte todavía más masivo de
energía, agua, alimentos, minerales y fibras desde regiones lejanas; la expansión de la
superficie ocupada a través de una dinámica de suburbanización; la separación funcional de
los espacios de la vivienda, el trabajo, el estudio, el comercio y el ocio; la segregación social,
que minimiza la coincidencia...