Crítica social en adorno

SOCIOCRÍTICA EN ADORNO

«Si es cierto que la meditación crítica del espíritu que domina la época y el estudio de las verdaderas relaciones sociales se compenetran y sostienen alternativamente, lo que se llama sociología de la cultura (término en sí mismo capaz de despertar alguna sospecha) no deberá agotarse en la consideración del contexto social en el cual actúan las obras artísticas, sinoprofundizar el sentido social de las mismas, y por lo tanto, y no en último término, el sig¬nificado de las mercancías que hoy sustituyen en gran medida la obra de arte en su autonomía. Es decir, se tratará de tomar la obra de arte como objeto de una investigación que descifre en ella una inconsciente historiografía de la sociedad. »



CULTURA INDUSTRIAL
Adorno se ve a sí mismo como hijo dela Ilustración, sin cuyos ideales de justicia, libertad y solidaridad, no cree que pueda alcanzarse la sociedad emancipada que anhela. Como Kant, piensa que este es un objetivo únicamente alcanzable mediante el uso de la razón, pero no de la razón de dominio que ha venido imperando hasta ahora, sino por el uso de una «razón crítica».
En Dialéctica de la Ilustración, Adorno y Horkheimer elaboranuna «sociología crítica» partiendo de la idea de que el proyecto ilustrado ha desembocado en un irracionalismo que produce la aniquilación de los individuos y de la sociedad. Esta dominación se manifiesta de manera trágica en dos fenómenos de su momento histórico: la cultura de masas y el antisemitismo. Se trata de la última consecuencia de una razón enferma que ha ido imponiéndose poco a poco enel tiempo hasta ejercer un férreo control sobre todas las esferas de la vida humana, la naturaleza, las relaciones entre los hombres, y que se materializa en forma de pesadilla bajo el poder de la «cultura» y la «barbarie».
A diferencia del marxismo, la idea de cultura de Adorno no depende de diferencias de clase: es un concepto de naturaleza amplia, que abarca todo el abanico de ideas,costumbres y expresiones artísticas que influyen en la vida de los individuos. Distingue ––siguiendo a Marcuse––, entre dos ámbitos de la cultura: una «cultura material», que abarcaría los modos de conducta moral, psicológico, de relaciones de producción; y una «cultura intelectual», referida a los valores más altos, donde se incluiría el arte.
Cultura y dominio, pues, están estrechamente relacionados enAdorno, que ve que el objeto de aquélla no es otro que el encubrimiento de una realidad fundada en la opresión. La cultura industrial representa la cosificación y fetichización de las relaciones humanas al haber elevado la cultura a la categoría de instrumento, un instrumento que en manos de la razón de dominio, con la aplicación de las nuevas tecnologías de difusión y producción masivas,mercantiliza la vida y manipula las conciencias a fin de perpetuar el sistema social .
El desarrollo de la industria de la cultura lleva a la supremacía de los resultados técnicos sobre el contenido de la obra . El arte ha perdido su valor y se convierte en un arte funcional: de ser una expresión de verdad, crítica y subversiva frente a las formas dominantes, se convierte en un producto sujeto también alas leyes de la eficacia, el beneficio económico y la utilidad.
Un arte así es un arte inauténtico e inútil, puesto que es incapaz de hacerse eco de las contradicciones del sistema y, de ese modo, iluminar una sociedad distinta. Adorno maneja dos acepciones de arte en Dialéctica de la Ilustración: está, en primer lugar, el Arte como promesa de una felicidad futura ––diferente de la propuestapor el arte de la industria cultural, que sólo es ideología y cosificación––, una felicidad que se encuentra truncada en el presente. Frente a éste, estaría el anti–arte, el de aquellos que saben que el arte existe pero no pueden experimentarlo, como los remeros del canto XII de la Odisea . Y podría hablarse, por último, del arte tal como lo experimenta Ulises en dicho canto. Como el burgués, él...