Derecho Romano

Introducción
Los seres vivos interactúan, hay que decirlo, es una condición impuesta por la naturaleza, pero ninguno lleva a tan alta escala dicha intersubjetividad como lo hace el ser humano, aunque es necesario admitir que la mayoría de las ocasiones no desenvuelve tan innata cualidad dentro del plano más adecuado, justa y moralmente hablando, de lo contrario, nuestro medio circundante noestaría en el estado en que se halla. Dentro de ese contexto, se encuentra el contrato, como medio efectivo de asegurar el desarrollo armónico y desconfiado de nuestra intersubjetividad
Citamos al pensador español José Ortega y Gasset, quien, en uno de sus tantos ensayos, dice que "...El contrato... es la cínica declaración de que desconfiamos del prójimo al tratar con él y le ligamos a nosotrosen virtud de un objeto material –el papel del contrato- que queda fuera de las dos personas contratantes, y en su hora podrá –vil materia que es- alzarse contra ellas”.
El artículo 715 del Código Civil Paraguayo prescribe que "Las convenciones hechas en los contratos... deben ser cumplidas de buena fe...", si todos lo hiciéramos así, ¿tendríamos necesidad de dicha figura jurídica que recuesta sucumplimiento, en último término y como todo elemento normativo jurídico, en la fuerza? Incumple 'el otro' y, por supuesto, acciono 'yo', le condenan a 'el otro', no paga, luego, les embargan los bienes a 'el otro', utilizando la fuerza si es necesario ( en tal sentido, reza el art. 171 del Código de Organización Judicial nuestro, cuando se refiere a las atribuciones y obligaciones de losOficiales de Justicia, quienes son los que diligencian los mandamientos de los jueces, que: "... solicitar, en caso necesario, el auxilio de la fuerza pública y el allanamiento de domicilio para cumplir con los deberes de su cargo...”
En síntesis, el relacionamiento de mi 'yo' con el 'otro' se hallará siempre respaldado por la violencia (lo cual quiere decir que aún nos falta mucho por evolucionar),aunque en último término por supuesto, ¡y es justamente ese el mérito de la figura del contrato!, mantener la armonía de las interacciones hasta último momento y evitar la involución del ser humano a etapas más desorganizadas y violentas de su historia, como la venganza privada y la ley del talión.

Cabe decir que el hombre necesita protegerse de su igual, no porque desconfíe de él in concreto,sino que desconfía de la predictibilidad del hombre in abstracto, de hecho, dudo que una persona que promete o pacta algo piense en el incumplimiento ab initio, digo, por lo menos una mayoría no lo hace, sin embargo, ¿quién puede predecir y calcular todos los eventos del interior y exterior de un individuo y la influencia de éstos en su actuar? El orden de prioridades del hombre cambia conformeva cambiando el curso de su existencia, así, en un futuro impredecible puede no ser ya una prioridad del promitente cumplir su promesa, mas si existe la posibilidad de que sea constreñido a cumplirla, difícil será que se niegue a efectuar la prestación debida, mas no imposible, ni mucho menos poco común, si no, los tribunales estarían casi desiertos... y los abogados sin trabajo.

Constituyeesta controvertida figura, entonces, la forma más importante de obligarse el ser humano con otro ser humano y, al mismo tiempo, garantía del cumplimiento de dichas obligaciones, proveniente casi sin modificaciones del perfeccionamiento que le fuera dado por los geniales pretores y jurisconsultos romanos y por tanto, objeto de estudio del presente trabajo práctico, el cual damos inicio sin máspreámbulo.

El Contrato:
El sustantivo contractus deriva del verbo contrahere, que estrictamente quiere decir in unum cogere, efficere, colligare, es decir, reunir, congregar, acumular, producir, y de esta manera utilizan el término los jurisconsultos romanos entendiendo que los que congregan o se reúnen no lo hacen sólo en el ámbito material o físico, sino también en espíritu, con propósitos...