El principe

DANIELA CORREAL ABELLO
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LA GLORIA DE UN GOBERNANTE ES LA GRANDEZA DE SU PUEBLO

“No se le puede llamar libre y sobrarna a la Nación que bajo el manto del temor elige a su gobernante; porque sin saberlo las cadenas de la sumición la apresan y se convierte en esclava de su propia ignorancia”
Introducción

En este trabajo, se pretenden examinar algunas de las conductas que debentener los gobernantes en el marco de el ejercicio de la política, para que exista un buen funcionamiento de todas las instituciones del Estado; todo esto teniendo en cuenta las ideas expuestas por Nicolás Maquiavelo en su obra literaria “El Príncipe”, en la cual establece distintos mecanismos con los que un gobernante lograría concentrar en sí mismo la autoridad necesaria para reorganizar unsistema político, permitiendo así la construcción de un Estado; mecanismos justificados a largo del texto por afirmaciones constantes en donde la ética propia de lo político tiene la capacidad de transformar actos como el engaño y crueldad; que examinados bajo la luz de otro contexto podrían ser reprochables, pero que al ser evaluados en el marco del ejercicio político pasan a ser permisibles.Esto queda de manifiesto en la medida en que se tome en cuenta que en su análisis, Maquiavelo integra lo que se podría denominar como “cultura” política. Es decir, la visión desde la cual Maquiavelo busca iluminar la importancia de elementos culturales en la comprensión de lo político y del ejercicio del poder.

Por su inteligencia y sagaz franqueza, Maquiavelo hace enfrentar al lector condiferentes disyuntivas éticas y morales al analizar el contexto práctico de lo político, ya que en su análisis del componente Estatal, el autor afirma de forma muy decidida que en lo político se debe hacer el mal. Esto resulta en gran medida de sus comentarios basados en la observación clara, libre de prejuicios, históricamente informada y fundada en la experiencia directa del accionar humano en política;en donde que bajo la concepción de la ética política el gobernante se debe remitir a un objetivo primordial: la gloria, por medio de la obtención y retención del poder, el cual debe estar justificado en el temor. Esta proposición se deriva observación tanto empírica como sistemática, esto significa, que, en último término, lo que es valorado, más allá de la simplicidad que representa el poder ensi mismo, es la gloria, y, además, es esta lo que todo agente de lo político debiera valorar.

Ahora bien, luego de haber realizado un pequeño marco contextual-argumentativo a partir del texto anteriormente citado, surgen diversos debates alrededor de la ética del gobernante y los recursos utilizados por este para alcanzar fines de naturaleza política; entre los cuales se evaluará el siguientecuestionamiento:

¿Constituye el poder basado en el temor de los ciudadanos de un Estado el camino más seguro para que un gobernante y/o líder político alcance gloria?

Desarrollo

Tendiendo en cuenta el interrogante planteado anteriormente, se entrarán a considerar cada uno de los elementos alrededor del ejercicio del poder como factor determinante para logar el objetivo principal de lapolítica que es la gloria de un gobernante, tomando como eje los instrumentos de los que este se vale para lograr dicho propósito.

El autor expone su modo de ver el comportamiento de un actor político, más allá de una lógica moral generalizada; ya que se encarga de crear un marco específico concerniente al ámbito político, mediante el cual fundamente vehementemente el hecho de que el ejerciciode la política tiene principios éticos propios, distintos a los que rigen el resto de actividades propias de los seres humanos, es decir, en lo político se permite llevar a cabo en ciertas circunstancias, actos que no serían admisibles que bajo la perspectiva de la moral cristiana serían rechazados.

En razón a ello, no se trata sólo hacer el mal o hacer el bien, sino que el eje fundamental que...