El Silencio De Las Palabras

EL SILENCIO DE LAS PALABRAS

Cuando se empieza a leer un texto, por lo general lo que se espera encontrar es una información objetiva, la cual se deba aceptar o rechazar de acuerdo a los prejuicios que se han construido en el paso de cada individuo por su formación académica en particular. De forma mecánica, se trata de comprender los discursos articulados en unas cuantas líneas. En algunasocasiones, la persona se limita a saber el sentido literal de los conceptos que el autor manifiesta en sus escritos, desconociendo las verdaderas razones que llevan a éste a expresar lo que piensa.
Y es por aquella objetividad “inconsciente”, en la que se pretende creer que todos los textos están premeditados a ser sólo letra muerta , que no se va más allá de su real intención. Caso contrario pasacon algunos autores de textos como Jorge Larrosa, profesor de pedagogía de la Universidad de Barcelona. Al hacer lectura de “Aprender de oído”, información recopilada de la intervención en el ciclo de debates Liquidación por derribo: leer, escribir y pensar en la Universidad, organizado por La Central en Barcelona durante abril de 2008, realizada por Larrosa, se tiende a proceder de la mismamanera que regularmente se hace: tratar de evacuar algunas paginas escritas en una breve lectura de conceptos, para por último, darle un sentido coherente a las frases y determinar así, otro método en la amplia gama de formas de enseñanza. Pero ocurre algo curioso con la disertación de este pedagogo. Cuando más se lee, más cosas nuevas se descubren, sometiendo a la persona receptora a indagar sobre laparte del texto, que a pesar de haber escuchado por mucho tiempo y creer haber entendido, en este punto cobra otro valor. En realidad pareciese que el objetivo de Larrosa fuera la de someter de manera voluntaria al lector a vivir consciente y reflexivamente, cada palabra que menciona, desde su discurso, expresión y contenido, poniendo en práctica de manera inmediata lo que en sus textos menciona.Los planteamientos centrales a los que Larrosa hace alusión, parten de un fragmento tomado de Claros del Bosque, de María Zambrano, en donde se habla de las aulas como “lugares de voz donde se va a aprender de oído”. Es así como él habla de cómo el aprender se confunde con el escuchar, presentando la imposibilidad de aprender de oído. En definitiva, lo que quiere transmitir el autor, es como losmaestros han perdido la posibilidad de tener voz propia, y de cómo en las aulas lo que se escucha es sólo la palabra sin sentido de lo que otros han dicho, no porque su contenido sea erróneo, sino por la falta de ese sentir que hace que en un punto converjan la palabra con el lenguaje y con el cuerpo.
Para comprender mejor a lo que se refiere Larrosa cuando habla de la voz, se puede citar unpasaje de Aristóteles copilado por Zambrano: “lo que está en la voz constituye el símbolo de los padecimientos del alma, y lo que está escrito, el símbolo de lo que está en la voz”. El lenguaje no debe convertirse en solo un instrumento de comunicación, sino que debe incorporar dentro de su expresión la marca particular del emisor, su inspiración, que contenga de manera intrínseca un toque depasión, el que con su tono capte la atención del que lo escucha, y que en su cuerpo se manifiesten las emociones que a su consciencia ha suscitado la experiencia directa con el texto. Un aprendizaje así es de oído, sin la necesidad de escribir esas palabras en hojas de papel, pues estás palabras, palabras vivas, quedan inscritas en el alma. Pero Larrosa también habla de la escritura con voz y de lasclases magistrales sin voz.
Él menciona además de cómo en las universidades se percibe el triunfo de los deslenguados, deslenguados que arrogan el derecho de decirnos a los demás qué lengua tenemos que usar y cómo debemos usarla . Aquí recuerdo una experiencia que tuve en la clase de Comunicación Pedagógica con la profesora Teresita Ospina, la que nos decía lo innecesario que se hacía estar...