Ensayo sobre la razón y la experiencia

Desear o no desear, he allí el dilema

“Lo que nos mueve es el deseo no la voluntad”, tal como explica Spinoza en el capítulo del Origen y la naturaleza de los afectos. El ser humano tiene como esencia el deseo, el deseo de hacer diversas cosas.

Pero las preguntas que me acosan son: ¿sólo podemos desear lo conocido?, ¿qué tanto influyen las experiencias ajenas en nuestras vivenciaspersonales?, sí imaginamos una experiencia basada en la razón y luego al vivirla es diferente, ¿qué pasa?

Todo esto tiene que ver con la experiencia y la razón de la que habla Montaigne, pues el plantea que en primera instancia intentamos utilizar la razón para la resolución de conflictos y cuando esta nos falla apelamos a la experiencia.

La experiencia es algo personal tal como lo dice Montaignecuando explica:

“(…) el fruto que podamos sacar de la experiencia apenas si servirá para nuestra educación aquella que sacamos de los ejemplos ajenos, si tan mal aprovechamos la propia que nos es más familiar y ciertamente suficiente para enseñarnos lo que necesitamos.”

Para empezar quiero dar una visión general con un ejemplo más simple. En primer lugar planteo que solo podemos desear lo queconocemos, pues lo que no sabemos que existe no nos provoca ninguna clase de sensación o sentimiento por la misma inexistencia de conocimiento del objeto del deseo. Es decir, no podemos desear algo que para nosotros no existe, y al decir no existe me refiero a que no está en nuestro “campo de conocimiento” y por lo tanto razón, para que algo entre en este campo debemos haber escuchado, visto,vivido o conocido de alguna manera el objeto del deseo que luego de ser conocido puede ser objeto del deseo o del NO deseo.

Por ejemplo, si yo no sé que son las drogas, nunca voy a desear probarla. En el momento en que conocemos cosas nuevas ya sea por experiencia propia o ajena podemos optar por desearlas o no desearlas.

Retomando con las drogas, como decía antes, si no sé de su existencia nopuedo desearle, pues no conozco la posibilidad de probarlas. Sí, por otro lado, están dentro de mi “campo de conocimiento” por experiencias ajenas, es decir, si un amigo me contó que probó tal o cual droga y su experiencia personal puedo pasar a desearla o no desearla.

Sin embargo, cada experiencia es personal, por lo que puede que la opinión de mi amigo respecto a su experiencia con las drogasno sea la misma que yo pueda experimentar.

Puede que para él haya sido algo placentero, y yo puedo pensar de acuerdo a la experiencia ajena que sería igual para mí, pero al probarlas me siento mal y no como el describió. Entonces, el conocimiento que yo tenía de los efectos de las drogas se ve afectado por mi propia experiencia y creo un nuevo conocimiento a partir de esta que luego yocompartiré con otras personas sin que necesariamente todos lleguemos a un acuerdo.

Entonces hasta qué punto el deseo puede ser real o verse frustrado en el lumbral de la experiencia y razón, entendiéndose este último término como conocimiento adquirido de otras fuentes ya sea refiriéndose a la moral creada en un por la familia, la información de libros y eruditos o la simple opinión de un amigo.Hasta que punto podemos idealizar algo y luego al experimentarlo, puede decepcionarnos o encantarnos sin pensar que eso pasaría. Puede que la razón nos explique cómo se siente tal o cual situación o como nos va a afectar, pero el momento de la experiencia es la mayoría de veces distinta a lo que la razón decía.

Para desear o no desear uno tiene que conocer, pero que sucede cuando uno cree desearalgo porque el conocimiento o la razón lo plantea como positivo pero al momento de lograr la experiencia esta es negativa. Se entra en una disyuntiva que puede terminar en la frustración o decepción.

Un claro ejemplo es la publicidad, la publicidad busca persuadir al consumidor por medio de palabras e imágenes que incentivan. Si por ejemplo, yo estoy viendo televisión y ponen un comercial de...