Enseñemos como jesus

ENSEÑEMOS COMO JESÚS
¿Qué es Educación Cristiana?
Lo que has oído decir en presencia de muchos testigos, encomiéndalo a creyentes dignos de confianza, que a su vez estén capacitados para enseñar a otros. 2 Timoteo 2:2

“Nuestro ministerio es la enseñanza. Jesús es nuestro modelo. La gente es nuestra pasión. Nuestro producto es la transformación de vidas. Y nuestra meta es el cielo.Esta es la esencia de la educación cristiana”.

El Bumerang Bíblico (La discusión de Jesús con Pedro Juan 21:15-17)
Cuando terminaron de desayunar, Jesús le preguntó a Simón Pedro:
-Simón, hijo de Juan, ¿Me amas más que éstos?
-Sí, Señor, tú sabes que te quiero -contestó Pedro.
-Apacienta mis corderos -le dijo Jesús. Y volvió a preguntarle:
-Simón, hijo de Juan, ¿me amas?
-Sí, Señor, túsabes que te quiero.
-Cuida mis ovejas. Por tercera vez Jesús le preguntó:
-Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?
A Pedro le dolió que por tercera vez Jesús le hubiera preguntado: “¿Me quieres?” Así que le dijo:
-Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero.
-Apacienta mis ovejas -le dijo Jesús.

La frase: “más que éstos” del versículo 15. ¿Amaba Pedro a Jesús más que qué?

Tempranoaquel día, Pedro y sus ex socios (Lc. 5:10) habían celebrado una junta (Jn. 21:3). Habían sobrevivido a los traumáticos acontecimientos de las últimas semanas, y ahora Jesús, crucificado y resucitado, ya no estaría más con ellos cada día. Desde su resurrección, lo habían visto solo dos veces pero estaban a punto de verlo por tercera vez. (v.14)

Sin embargo, antes del siguiente encuentro,Pedro tenía que tomas una decisión. ¿Qué haría ahora con su vida? Convenció a sus compañeros que volvieran a su antigua profesión. Es como si hubieran llegado a la conclusión de que los últimos tres años habían sido una linda experiencia, pero que ahora era tiempo de ponerse serios y volver al trabajo. Sus compañeros estuvieron de acuerdo y se fueron a navegar. Aquella noche, sin embargo, elnegocio fracasó; los pescadores no pescaron nada.

A la mañana siguiente, Pedro vio a alguien parado en la orilla pero no pensó que fuera Jesús. El hombre le preguntó si habían pescado algo. La respuesta de Pedro fue: “Nada”. Entonces el hombre le dijo que echara las redes al otro lado de la barca. Le hizo caso porque a menudo una persona parada en la orilla podía ver mejor los bancos de pecesque los pescadores en la barca. Ante la inesperada y enorme pesca, Juan se dio cuenta: “¡es el Señor!” gritó. Pedro salió fuera del bote y nadó hasta la playa donde Jesús tenía un fuego esperando.
¿Se puede imaginar aquel desayuno celestial de pescado frito y pan? Después de una noche infructuosa, Pedro y sus asociados disfrutaron de una sabrosa comida, aparte de la tremenda pesca: 153 pecesgrandes para ser exactos (v.11). ¡Lo más probable sería que fuera Pedro quien los contó! Y debe haber llegado a la conclusión de que si la pesca seguía siendo como esta, el negocio de la pesca sería sencillamente fenomenal.

Después del desayuno, sin embargo, Jesús le hizo a Pedro una proposición diferente. Empezó por preguntarle si lo amaba más que “éstos”. La pregunta que surgeinmediatamente es: ¿A qué o a quiénes se refiere con “éstos”? Seguramente, Jesús no quería comparar el amor de Pedro por él con el de los otros discípulos. Juan, que también había participado en el festín de aquella mañana, había demostrado su gran amor por Jesús quedándose cerca de él la noche que fue arrestado. Fue Juan quien permaneció al pie de la cruz acompañando a Maria (Jn. 19:26). De modo que Jesúsno pudo haber preguntado a Pedro si lo amaba más que los otros discípulos, porque Juan estaba sentado entre ellos.

Entonces, ¿con qué comparaba Jesús el amor de Pedro? Sabiendo que Pedro había decidido volver a su oficio de pescador, imagínese a Jesús señalando hacia la pequeña montaña de peces y preguntando: “Pedro, ¿me amas a mí más de lo que amas el negocio de la pesca? ¿Me amas a mí...