Entrevista

La entrevista como arma letal

Dicen que las palabras son el arma más efectiva y, en lo que se refiere a mi opinión, concuerdo cien por ciento con dicha afirmación. No existe cosa que hagaincomodar más a una persona que un comentario que no quiere oír, es decir, la verdad sobre ella, su realidad o cualquier cosa que le afecte.

Siempre vamos presumiendo de la tolerancia, sencillez y gradode confianza que tenemos en nosotros mismos, sin embargo, solo basta un simple comentario para comenzar a desmoronarnos; pero algo está seguro, no se lo dejaremos saber a nadie.

Por seres humanosque somos, estamos siempre expuestos a críticas, mentiras, verdades y a cualquier otro acontecimiento que nos suceda. Sobre todo, cuando eres alguien influyente en la sociedad. Cuando eres famoso esnormal que todos quieran saber lo que haces, lo que no, lo que harías y lo que ni se te ocurriría hacer, y eso no es un pecado. Es por ello que esa misma condición, de seres humanos, nos salva y nosperjudica. Unas veces, entendemos que no somos perfectos y que cometemos errores; otras, nos dedicamos sencillamente a apuntar con el dedo aquello que creemos que está mal. Claro está que vamos aseñalar y a apuntar, siempre y cuando, no seamos nosotros los protagonistas de la acusación.

Ahora, me pregunto, ¿Cómo reaccionamos cuando recibimos un elogio o un premio? Pasa todo lo contrario:queremos que hablen de nosotros, ser reconocidos, que nos entrevisten y que nos consideren importantes. Entonces, si aunque las circunstancias cambian, ¿por qué no podemos recibir con gratitud uncomentario, y evaluar si podría ayudarnos a mejorar? Si no nos ayuda, lo podemos ignorar y lograríamos alcanzar eso de lo que tanto presumimos: tolerancia.

Luego de haber dicho todo esto, prosigo concontextualizar todas esas palabras en solo dos: Entrevistas Malandras, libro de Nelson Hippolyte que me hizo ir más allá de lo escrito y de lo leído. Este libro es una recopilación de una serie de...