HÁBITOS DE LECTURA
constantemente, en casa o en la oficina, del correo electrónico al periódico, de
una web a una nota manuscrita, del idioma materno a una linguafranca, deun registro coloquial a otro formal, de un género a otro, de un tema
profesional especializado a uno de ocio, etcétera, y en todos los casos hay que
comprender críticamente el texto para poderactuar
La migración paulatina e irreversible de las formas de comunicación escritas
tradicionales (carta, catálogo, periódico en papel) hacia los nuevos formatos
electrónicos (correoelectrónico, web, chat) constituye el cuarto factor que
provoca necesidades nuevas de comprensión. La irrupción de Internet en
nuestras oficinas y hogares provoca numerosos cambios en las prácticascomunicativas orales y escritas
http://www.lecturayvida.fahce.unlp.edu.ar/numeros/a25n2/25_02_Cassany.pdf
Pennac, él mismo docente en ejercicio, descubre también lo mucho que les cuesta a losjóvenes el hábito de lalectura. La sufren. La padecen. Ha de ser, se dice, porque “el verbo leer no soporta el imperativo”. Desde el momento en que la lectura pierde su condición de placer, cuando el padreocupado deja de leerle al niño, los chicos no encuentran en los libros más que motivos de frustración.
- El derecho a no leer (porque la lectura ha de ser un acto de libertad).
- El derecho asaltearse las páginas.
- El derecho a no terminar un libro.
- El derecho a releer (los niños disfrutan de la repetición, y no sólo los más pequeños).
- El derecho a leer cualquier cosa (incluso si noes la “gran novela” sino el best-seller de moda).
- El derecho al bovarismo (enfermedad de transmisión textual).
- El derecho a leer en cualquier lugar.
- El derecho a hojear (sin temor aenfrascarse en una lectura que decepcione).
- El derecho a leer en voz alta (como leen cuentos los padres a los niños pequeños).
- El derecho a callarnos (y no necesitar explicar, luego de cada lectura,...
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