Lectura

Páginas: 11 (2694 palabras) Publicado: 8 de febrero de 2014
Emotiva: ¡Ayúdenos! ¡No sabemos si está muerto!
Fatica: ¿Esa mesa que está ahí preparada no será para mi compadre Bill?
Literaria: Recuerdo que fue un helado amanecer de enero. La ensenada estaba cubierta por, la blancura de la escarcha, la mar en calma rompía suavemente en las rocas de la playa y el sol naciente iluminaba las cimas de las colinas resplandeciendo en la lejanía del océano
Vozdel autor: Lo recuerdo como si fuera ayer, meciéndose como un navío llegó a la puerta de la posada, y tras él arrastraba, en una especie de angarillas, su cofre marino; era un viejo recio, macizo, alto, con el color de bronce viejo que los océanos dejan en la piel; su coleta embreada le caía sobre los hombros de una casaca que había sido azul; tenía las manos agrietadas y llenas de cicatrices, conuñas negras y rotas; y el sablazo que cruzaba su mejilla era como un costurón de siniestra blancura. Lo veo otra vez, mirando la ensenada y masticando un silbido; de pronto empezó a cantar aquella antigua canción marinera que después tan a menudo le escucharía:
Tema General: El squire Trelawney, el doctor Livesey y algunos otros caballeros me han indicado que ponga por escrito todo lo referentea la Isla del Tesoro, sin omitir detalle, aunque sin mencionar la posición de la isla, ya que todavía en ella quedan riquezas enterradas; y por ello tomo mi pluma en este año de gracia de 17...
11_. Remábamos despacio, como había ordenado Silver, para no cansar a los hombres antes de tiempo, y después de una larga travesía desembarcamos en las cercanías del segundo río, el que desciende por unode los barrancos del Catalejo. Desde allí, torciendo a la izquierda, empezamos a ascender hacia la meseta. Al principio el terreno, pesado y fangoso, con una casi impenetrable vegetación, retrasó mucho nuestra marcha; pero poco a poco la pendiente fue haciéndose más dura y pedregosa y los matorrales clareando. Aquélla era ciertamente una parte de la isla de las más agradables. Una aromática retamay numerosos arbustos con flores sustituían la hierba. Bosquecillos de verdes árboles de nuez moscada alternaban con las rojizas columnetas y las largas sombras de los pinos, y el olor de las especies de los unos se mezclaba al aroma de los otros. El aire fresco y vigorizante, lo que, bajo los ardientes rayos del sol, refrescaba nuestros sentidos.
Todos los piratas empezaron a corretear, gritandocon gran contento. Se esparcieron como un abanico, y en el centro, tras ellos, Silver y yo caminábamos, yo atado a mi cuerda y él renqueando y fatigado, con mil tropezones. Alguna vez tuve que ayudarlo o hubiera caído rodando cuesta abajo.
Llevábamos más de media milla en nuestra subida y ya estábamos alcanzando el borde de la meseta, cuando uno que iba destacado hacia la izquierda empezó allamar a gritos, como sobrecogido por el terror. Todos empezaron a correr en aquella dirección.
-No puede ser que haya encontrado el tesoro -dijo el viejo Morgan pasando ante nosotros-; el tesoro debe estar más arriba. Lo que en realidad sucedía era cosa bien distinta, como pudimos comprobar, cuando llegamos a aquel sitio. Al pie de un pino bastante alto, y como trenzado en una planta trepadora.....NEXOS: salieron del bosque de árboles de la nuez y se unieron a nosotros con los mosquetes aún humeantes.
contestó el abandonado, casi temblando como un anguila en su azoramiento-. Y -siguió después de una larga pausa
El doctor envió a Gray a buscar uno de los picos que los amotinados habían olvidado en su fuga; y conforme regresamos, caminando ya con toda tranquilidad cuesta abajo hasta dondeestaban fondeados los botes
Me han indicado estos caballeros que no le conduzca hasta los jueces, y no pienso hacerlo.
Creo que se trata de un buen navegante, pero es demasiado campechano con la tripulación para ser un buen oficial.
Narración: El squire Trelawney, el doctor Livesey y algunos otros caballeros me han indicado que ponga por escrito todo lo referente a la Isla del Tesoro, sin...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Lecturas
  • Lectura
  • La lectura
  • Lectura
  • Lectura
  • Lectura
  • Lecturas
  • Lectura

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS