Tecnología y libertad

REFLEXIONES DE FIN DE SIGLO

Finaliza el siglo, y deslumbran los éxitos aparentes de la humanidad. El intenso desarrollo científico y técnico elimina las especulaciones abstractas para centrar laatención sobre algunos problemas concretos.
El siglo XX, que alumbró logros insospechados en sus inicios, acaba con dos tercios de la población del mundo padeciendo hambre. Se proclama una libertadque es meramente declarativa, ya que demasiados hombres carecen de los medios para transformarla en efectiva. Cualquiera puede adquirir lo que necesita, no hay leyes que se lo veden, pero cunden ladesocupación y la miseria. ¿Cuántos pueden hoy acceder a los bienes indispensables? . ¿Quiénes son entonces los libres?. La respuesta es obvia: libres son sólo aquellos que disponen del dinero necesariopara ejercer efectivamente su libertad.
El resultado del pasmoso progreso de la ciencia no ha logrado mejorar a la humanidad. ¿Ha dejado el hombre de explotar a su semejante, hay en el mundo másjusticia y más caridad, ha dejado de empaparse el planeta con nuevos torrentes de sangre?. ¿Valió la pena emplear largos años de cálculos y ensayos para arribar al avión o a la tecnología satelital, paradestinarlos luego al asesinato con la misma brutalidad atávica de los cavernícolas.
Por cierto no estamos dispuestos a renunciar a ninguna de las conquistas realizadas; es más esperamos acrecentarlasvalidos del formidable instrumento de la ciencia. Pero la ciencia no basta. Es preciso subordinarla a un principio superior, a un principio ético.
Se descubren a diario nuevos métodos para aumentarla producción de alimentos, nuevos elementos de confort; a la par mueren seres humanos a causa del hambre y del frío. ¿Es que se está construyendo un nuevo mundo sólo para unos pocos?. Aparentemente esasí.
Mientras tanto los muchos excluidos no aciertan con la llave que les abra la puerta para salir de su exclusión. Seducidos por los cantos de sirena que les ofrecen la salida individual...