Libertad o exclusion

Es como una pequeña herida de juventud que tiene el Distrito Federal en la colonia Guerrero, ahí, muy cerca de la estación ferroviaria de Buenavista. Se prolonga a lo largo de varias cuadras ychorrea... sangre negra. Esta herida aparece y desaparece cada sábado y entonces uno ve ese fluir, esa vitalidad de glóbulos, en este caso negros, en la forma de chavos, ex chavos, ex hippies y hasta gentede apariencia convencional.
En su mayoría han asumido el negro como color de vestuario y bandera, argollas, aretes de metal colgados en diversas partes del cuerpo, tatuajes y los cabellos de lacabeza como maceta portátil en constante primavera.
Es el tianguis del Chopo.
México se ha caracterizado por ser un crisol de imágenes y vivencias, una fusión de pensamientos e ideas. En la capirucha,nació hace algunas décadas (60´s) un movimiento cultural (subculturas o tribus) donde buscaban encontrase a sí mismos; a la vez de ser escuchados por sus padres y un gobierno autoritario. No pasomucho tiempo en que lo jóvenes adoptaran tendencias de otros países. En ese momento se aspiraba a una emancipación, ser reconocidos por su valía y sobre todo, que tenían algo decir. Para los demás(adultos) el supuesto de que el joven mexicano no piensa, sólo actúa en base a sus necesidades.
Los movimientos sociales ocurridos en varias partes del mundo, en especifico en Estados Unidos, abre los ojosal chavo mexicano, el poder de la palabra, la expresión del alma, una intensidad de compromiso con las experiencias musicales, literarias y farmacológicas. “Dropo ut, Tune in, Turn on. Salta deljuego, ponte en onda, préndete”.Es ahí cuando el mexicano empieza a sentir admiración por el rock y sobre todo escucharlo bajo la influencia de las drogas (mariguana, peyote, hongos, entre otros). Alescuchar a los grupos del momento: Beatles, Rolling Stones, Jannis Joplin, Jimie Hendrix mientras se deleitan con un porro; significa elevarse, cambiar la forma de pensar y sentir, en pocas palabras...